En los últimos años, la Unión Europea (UE) ha promovido activamente las energías renovables intermitentes como parte de la transformación verde, aunque hasta ahora, no ha dado sus frutos. En lugar de alejarse de los combustibles fósiles, la UE depende cada vez más de las importaciones de gas natural, mantiene las plantas de carbón y no está cerca de la descarbonización. La triste realidad de la transición verde europea es que el principal ganador es el gas natural. Aún así, las cosas pueden cambiar si confiamos aún más en los últimos avances tecnológicos, incluida la Inteligencia Artificial (IA).
¿CÓMO LOGRAR UNA ECONOMÍA BAJA EN CARBONO?
En nuestra opinión, existen principalmente dos opciones:
- La demanda. Esto significa decrecimiento y menor consumo, pero creemos que la mayoría de los europeos aún no están listos para cambiar de manera radical su comportamiento de consumo. Se trata de un proceso a largo plazo que está a la vuelta de la esquina.
- La oferta. Esto significa mayores inversiones en infraestructuras energéticas, nuevas tecnologías, mejora de la eficiencia energética y aumento de la productividad. Hay margen de mejora en todos estos aspectos.
Actualmente, la energía renovable tiene poca utilidad en el mix energético porque no puede proporcionar un suministro constante de energía, pero la tecnología puede ayudar. Los grandes proyectos industriales ahora buscan abordar el problema de la intermitencia del viento, por ejemplo. En lugar de aumentar el número de parques eólicos marinos conectados individualmente a las redes nacionales (lo que aumenta los costos y reduce la eficiencia sistémica), el operador holandés de transmisión de electricidad TenneT promueve la idea de islas artificiales en el Mar del Norte. Estas servirán como centros para distribuir electricidad de manera optimizada a los países vecinos. Se trata de un proyecto piloto que tardará años en implementarse, pero si tiene éxito, podría acelerar la adopción de la energía eólica.
EJEMPLO: CASO DE NEGOCIO – PLANTAS SOLARES
La IA es otro campo de investigación que promete abordar los problemas de suministro de energía renovable. Actualmente estamos trabajando en dos proyectos con Canadian Solar, una de las empresas de almacenamiento de energía y energía solar a gran escala más grande y geográficamente diversificada del mundo.
En la primera etapa de nuestra colaboración, nuestro equipo está trabajando en el mantenimiento predictivo, uno de los mayores dolores de cabeza en la industria energética. Los inversores son los elementos más problemáticos de una planta. Varios problemas pueden causar fallas en el inversor: uso excesivo, sobrevoltaje y bajo voltaje, vibraciones ultrasónicas (que pueden causar fricción y dañar los inversores) y desgaste del capacitor (tienen una vida útil limitada y envejecen más rápido que otros componentes, lo que provoca la falla del inversor). Cuando esto sucede, puede reducir la producción solar en más de un 20 %. La IA puede ayudar con el monitoreo de la detección de anomalías y con la previsión de fallas para prevenirlas en los inversores antes de que sucedan, evitando así la disminución de la producción. La solución de mantenimiento predictivo de Substrate AI se está probando en tres de las plantas fotovoltaicas de Canadian Solar. Para fin de año, planeamos implementar nuestra tecnología en todas las empresas de energía, tanto grandes como pequeñas, que luchan por lograr eficiencias operativas y ahorros de costos.
En la segunda etapa, planeamos trabajar en pronósticos de producción con IA. Vender energía libremente y gestionarla para conseguir un buen precio puede aumentar la rentabilidad de una planta solar en más de un 40 %. Normalmente, la energía se vende a granel a un comerciante que hace este trabajo. Estamos ayudando a los operadores de energía, en ese caso concreto a Canadian Solar, a entrar en este negocio. Pero para tener éxito, necesitan sistemas de inteligencia artificial que les ayuden a comprender cómo funcionan sus plantas. Esperamos comenzar a trabajar en este proyecto a partir del segundo semestre de 2022.
HACERSE VERDE, HACERSE LOCAL
Creemos que las iniciativas locales jugarán un papel clave para permitir la transición verde. Esta es nuestra responsabilidad social como empresa para hacerlo realidad.
La eficiencia energética en los edificios es una parte integral de volverse local. Actualmente estamos implementando sistemas de IA para gestionar la energía de los edificios manteniendo el máximo confort con el mínimo gasto. Esto se encuentra en una fase de prueba. Esperamos que el ahorro en el consumo supere el 20 %.
En este proyecto, trabajamos de la mano del grupo de Ingeniería Sener y la empresa de vehículos eléctricos inteligentes Wallbox (utilizando su sistema Sirius, una innovadora solución de gestión energética) para ayudarnos a gestionar todas las fuentes y consumos energéticos para obtener el máximo rendimiento. Todo esto se hace utilizando nuestra solución de IA de inspiración biológica. Esperamos un lanzamiento comercial en 2023.
Este es sólo el comienzo. La IA puede ser una parte integral del proceso de transformación ecológica al ayudar a administrar mejor los datos, reducir los costos y predecir fallas del sistema, entre otras cosas. Sin duda, esta es la única forma de lograr una economía baja en carbono (actuando del lado de la oferta en lugar del lado de la demanda, con un ladrillo tecnológico en la parte superior).
Fuente: Substrate AI
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